La enfermedad arterial periférica (EAP) es una afección causada, principalmente, por la formación de depósitos grasos (conocidos como ateromas) a lo largo de las paredes de las arterias que transportan la sangre. Debido a esto, los vasos se estrechan y pueden llegar a bloquearse, afectando a la circulación sanguínea, especialmente en piernas y pies, pero puede afectar a cualquier parte del cuerpo.
Enfermedad arterial periférica
La enfermedad arterial periférica, a menudo, se produce por la aterosclerosis en la que los depósitos grasos se acumulan en las paredes de las arterias y reducen el flujo sanguíneo pudiendo, incluso, llegar a bloquearlo. Con menos frecuencia puede deberse a inflamación en los vasos, lesiones o malformaciones de ligamentos o músculos.
De entre los factores no genéticos que pueden ayudar al desarrollo de la patología destacan:
- Fumar.
- Diabetes.
- Obesidad.
- Hipertensión.
- Hipercolesterolemia.
- Es más habitual a partir de los 65 años, aunque puede darse antes en personas con riesgo alto.
- Niveles altos de homocisteína, un aminoácido esencial pero que en exceso puede dañar las paredes arteriales.
Síntomas
La mayoría de las personas con enfermedad arterial periférica no presentan síntomas o estos son leves, aunque un porcentaje puede presentar síntomas incapacitantes. Lo más habitual es que ocurra en los miembros inferiores, donde se dificulta el retorno venoso, aunque puede aparecer en cualquier punto del organismo. Entre los síntomas más comunes se incluyen:
- Calambres musculares dolorosos en cadera y/o piernas tras realizar actividad física.
- Entumecimiento o debilidad en las piernas.
- Sensación de frio en la parte inferior de la pierna o pie.
- Llagas o heridas que no cicatrizan en las extremidades inferiores.
- Cambio de coloración de la piel.
- Piel brillante en las piernas.
- Falta de pulso o pulso débil en la zona afectada.
Prevención
La mejor forma de prevenir la enfermedad arterial periférica es llevar un estilo de vida saludable que incluya:
- Evitar el tabaco y la exposición pasiva a su humo.
- Mantener la diabetes controlada, en caso de padecerla.
- Practicar ejercicio con regularidad.
- Reducir los niveles de colesterol.
- Mantener un peso saludable.
- Evitar el consumo de alimentos ricos en grasas saturadas y azúcares, priorizando las frutas, verduras y cereales integrales.
13,5 millones de variantes
18 loci
Bibliografía
Klarin D, Lynch J, Aragam K, et al. Genome-wide association study of peripheral artery disease in the Million Veteran Program. Nature Medicine. 2019 Aug;25(8):1274-1279.
Centers for Disease Control and Prevention (CDC) [March 2022]