La hemoglobina es una proteína que se encuentra en los glóbulos rojos o eritrocitos, y cuando se unen moléculas de glucosa, da lugar a la forma glucosilada de la hemoglobina, conocida como HbA1c. La medición de los niveles de HbA1c desempeña un papel fundamental en el diagnóstico y seguimiento de la diabetes, una enfermedad que afecta a cerca del 9.3% de la población mundial.
Niveles de hemoglobina glicosilada
La hemoglobina glucosilada, también conocida como hemoglobina A1c o simplemente HbA1c, es un marcador que se utiliza para medir el control a largo plazo del azúcar en la sangre. Esta prueba proporciona una estimación promedio de los niveles de glucosa en sangre durante un período de aproximadamente 2 a 3 meses, ya que refleja cómo se han mantenido los niveles de azúcar en la sangre en ese periodo de tiempo. Es una de las pruebas que se usan de forma común para el diagnóstico de la prediabetes y la diabetes.
La glucosa en la sangre se une de forma natural a la hemoglobina, una proteína presente en los glóbulos rojos. Esta unión persiste durante un periodo que oscila entre 90 y 120 días (aproximadamente 3 meses). Cuando los niveles de glucosa en sangre permanecen elevados durante un tiempo prolongado, más glucosa se adhiere a la hemoglobina. La medición de la HbA1c refleja este proceso de glucosilación y proporciona una indicación del control de la glucosa en sangre promedio durante las semanas previas. Cuanto más alta sea la concentración de HbA1c, mayor será el promedio de azúcar en sangre durante ese período, y viceversa.
Un nivel de HbA1c inferior al 5.7 % se considera dentro de los valores normales, mientras que un rango de 5.7 a 6.4 % indica la presencia de prediabetes. Cuando la HbA1c alcanza o supera el 6.5 %, se establece el diagnóstico de diabetes. En el caso de la prediabetes, cuanto más alto sea el valor de la HbA1c dentro del rango de 5.7 a 6.4 %, mayor será el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
Los factores de riesgo asociados a este rasgo están relacionados con la diabetes y la prediabetes. En este sentido, el sobrepeso, la edad (personas mayores de 45 años), la experiencia previa de diabetes gestacional, los antecedentes familiares y la pertenencia a ciertas etnias (como afroamericanos, hispanos o latinos, indoamericanos, nativos de las islas del Pacífico y asiaticoamericanos) se han identificado como elementos que aumentan el riesgo de tener alterados los niveles de hemoglobina glucosilada.
13,5 millones de variantes
168 loci
Bibliografía
Asociación Mexicana de Diabetes (AMD) [Febrero 2022]
Centers for Disease Control and Prevention (CDC) [September 2022]
Sinnott-Armstrong N, Tanigawa Y, Amar D, et al. Genetics of 35 blood and urine biomarkers in the UK Biobank. Nat Genet. 2021 Feb;53(2):185-194.